Hans Steffen llegó a Chile en 1889, contratado como docente de la carrera de Geografía en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile.

En este contexto, fue convocado como asesor de la Comisión Chilena de Límites, constituida para esclarecer la frontera con Argentina en tierras Australes. En este rol, lideró numerosas expediciones y realizó importantes aportes para el reconocimiento del territorio en disputa, que se resolvió con el Laudo Aribitral de 1902.

En 1914 Hans Steffen regresó a Europa y falleció en Davos, Suiza el año 1936.

Durante la década de 1990, los geólogos y andinistas Silvia Metzeltin y Gino Buscaini, encontraron su tumba en evidente abandono y se inició un proceso que culminó en la repatriación de sus restos cinerarios al cementerio del sector El Claro en Coyhaique.

La lápida enviada también a Coyhaique, estuvo en el antiguo Museo de la Patagonia, hasta que la colección ingresó al Museo Regional de Aysén, donde pudo ser documentada y restaurada.